lunes, 31 de agosto de 2009

Hambriento de tí...

Hambriento de ti recorro el mundo,
hambriento de ti sin comer bocado alguno,
pues la comida no me apetece,
solo tu cuerpo hace de hambre enloquecer mi vida.

Hambriento de tus ojos azabache,
cuan desesperado sabueso aspiro el aire tratando de seguir tu rastro,
para devorarte lentamente con mis besos,
hambriento de tu piel de chocolate.

Ávido de tus labios,
hambriento de tu silueta,
quiero morder tu sombra,
para que en mi boca se derrita tu flamante belleza.

Muñeca de caramelo,
única capaz de saciar mis deseos,
quiero comerte el corazón,
para calmar esta tristeza y sentir de nuevo el alivio de tu amor.